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Masones cubanos denuncian intromisión estatal en las finanzas del asilo Llansó y anuncia la devolución de donaciones del exterior tras amenazas de proceso penal.Diario de Cuba. 

Masones cubanos denuncian intromisión estatal en las finanzas del asilo Llansó
Diario de Cuba
11 de julio de 2025

Entrada al hogar de ancianos. Asilo Nacional Masónico Llansó/ Facebook

El Patronato del hogar de ancianos masónico denuncia una auditoría en violación de su autonomía y anuncia la devolución de donaciones del exterior tras amenazas de proceso penal.

El Patronato del Hogar Nacional Masónico Llansó denunció esta semana lo que considera una violación a la autonomía de la masonería, tras la intervención de autoridades estatales cubanas en los asuntos financieros del asilo, ubicado en La Habana.

Según un informe aprobado por unanimidad por los miembros del Patronato, al que tuvo acceso CubaNet Noticias, el pasado 1 de julio una comisión integrada por funcionarios del Ministerio de Justicia, la Contraloría General de la República y la Dirección Nacional del Adulto Mayor realizó una visita sorpresiva a la institución con el objetivo de auditar libros y vales relacionados con donaciones en divisas enviadas por masones residentes en el exterior.

El informe señala que la comisión estaba conformada por el Dr. Alberto Soto, responsable nacional del Adulto Mayor; Odalys Oliva, funcionaria del Registro de Asociaciones del Ministerio de Justicia; y una auditora no identificada de la Contraloría General. El foco de la revisión fueron las donaciones en moneda extranjera utilizadas para el mantenimiento y funcionamiento del hogar.

Los miembros del Patronato rechazaron la auditoría por considerar que el Estado no tiene competencia sobre fondos privados destinados por la masonería: "Nadie puede auditar el dinero que no tiene que ver con ellos", reza el documento. Además, calificaron el hecho como "una violación hacia la autonomía del Patronato y por ende a la masonería".

El Patronato señaló que el operativo responde a un intento de "perjudicar al presidente del Patronato", y negó categóricamente cualquier uso indebido de los fondos: "Asumimos un asunto de complicidad de las autoridades con el objetivo que todos sabemos", señala el informe sin ofrecer más detalles.

Posteriormente, el director del asilo, Raúl Acosta, fue citado por una oficial identificada como la teniente coronel Kenia, quien lo notificó del inicio de un proceso penal por presunto tráfico de divisas, delito que puede ser penado con hasta 20 años de prisión. Esta acción tuvo lugar pese a declaraciones previas del ministro de Justicia, quien había asegurado públicamente que su ministerio no intervendría en los asuntos internos de la masonería.

"Las donaciones en divisa no le conciernen a ninguna autoridad fuera de los masones", reitera el informe del Patronato, en el que se afirma que los recursos son enviados desde el exterior para ser gestionados exclusivamente por los responsables del asilo.

Como respuesta, el Patronato adoptó varias medidas. Así, decidió que las cuentas en divisas solo podrán ser revisadas por masones autorizados por el Patronato; el dinero y los libros contables serán resguardados en una caja fuerte bajo custodia del presidente del Patronato; se prohíbe el acceso de autoridades estatales a los fondos donados; los alimentos donados solo podrán ser inspeccionados por entidades sanitarias, no por otras instituciones estatales.

En señal de protesta y como medida preventiva, los directivos del Patronato acordaron contactar a todos los donantes desde marzo de 2024 para devolver las contribuciones realizadas hasta la fecha. Aunque reconocen que la decisión afectará a los residentes del asilo, consideran que "es la forma de evitar próximas situaciones desagradables".

En enero de 2024 el asilo sufrió el robo de 19.000 dólares resguardados en la oficina del líder de los masones cubanos, entonces el Gran Maestro, Mario Alberto Urquía Carreño, ubicada en el onceno piso de la sede de la Gran Logia de La Habana. El hecho fue el detonante de una crisis que no terminó con la expulsión de Urquía Carreño y ha trascendido hasta hoy.