La Cancillería convoca a Hammer por incitar a los ciudadanos cubanos a cometer actos delictivos. 14ymedio.
La Cancillería convoca a Hammer por "incitar a los ciudadanos cubanos a cometer actos delictivos"
14ymedio
30 de mayo de 2025
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30 de mayo de 2025

Mike Hammer, jefe de la misión de EE UU en Cuba, frente al cartel antigubernamental borrado en el reparto Lenin, en Holguín. / Cortesía/14ymedio
Este pasado fin de semana nuestro jefe de misión visitó en Santa Ifigenia la tumba del apóstol de la patria José Martí en la ocasión del 130 aniversario de su fallecimiento en combate. Y hoy le hacemos homenaje recordando a sus palabras. pic.twitter.com/OoHn1evyaB
— Embajada de los Estados Unidos en Cuba (@USEmbCuba) May 19, 2025
Se le acusa de utilizar la inmunidad diplomática "como cobertura para actos contrarios a la soberanía y el ordenamiento interno del país"
El encargado de Negocios de la Embajada de EE UU en La Habana, Mike Hammer, recibió este viernes una nota verbal de la Cancillería cubana en la que se le acusa de incitar a los cubanos a cometer delitos graves contra el Estado. El diplomático fue convocado al Ministerio de Relaciones Exteriores por su “conducta injerencista e inamistosa”, como el régimen describe su prolija agenda de visitas a opositores y emprendedores.
En declaraciones a Martí Noticias, un funcionario del Departamento de Estado de EE UU respaldó las acciones del diplomático: "el Jefe de Misión, Mike Hammer, y la Embajada de Estados Unidos representan con orgullo al presidente Trump implementando una política exterior de 'Estados Unidos Primero' y exigiendo la rendición de cuentas del régimen cubano por su influencia maligna en el continente americano".
"Seguiremos reuniéndonos con patriotas cubanos, líderes religiosos y quienes luchan por las libertades de los cubanos" , añadió el Departamento de Estado, que subrayó que han sido las políticas "corruptas, ineptas y fallidas" del régimen las que causan malestar entre lso cubanos.
Alejandro García del Toro, diplomático durante varios años en Washington y ahora director para los temas bilaterales con EE UU, fue el encargado de leerle a Hammer –"una vez más"– la cartilla. La Cancillería argumenta que el representante estadounidense ha violado la Convención de Viena y el Acuerdo de Restablecimiento de Relaciones Diplomáticas suscrito entre La Habana y Washington.
Una nota de la Cancillería asegura que la conversación fue “enfática” y que Hammer fue acusado de “incitar a ciudadanos cubanos a cometer actos delictivos de marcada gravedad, atentar contra el orden constitucional o estimularlos a actuar contra las autoridades, y a manifestarse en apoyo de intereses y objetivos de una potencia extranjera hostil”.
García del Toro le espetó al representante de EE UU que no podía aprovechar la inmunidad diplomática “como cobertura para actos contrarios a la soberanía y el ordenamiento interno del país”, y sostener una “conducta provocadora e irresponsable”.
Criticó también las alusiones de Hammer a José Martí, que la Cancillería considera una muestra de “manipulación pública e insultante”. En un video de su visita al cementerio de Santa Ifigenia, en Santiago de Cuba, el pasado 19 de mayo –aniversario de la caída en combate del prócer–, el diplomático aludió a Martí como “el Apóstol de la patria”.
Hammer citó una frase que al régimen le resulta problemática: “El respeto a la libertad y el pensamiento ajenos, aun del ente más infeliz, es en mí fanatismo. Si muero o me matan será por eso”. La nota verbal asegura que el diplomático desconoce, por citar ese pensamiento, el “antiimperialismo” de Martí y remachó –con argumentos válidos en el siglo XIX, pero en modo alguno aplicables a la situación actual– que EE UU es un “peligro” para la Isla.
Como una suerte de contraataque simbólico, García del Toro entregó a Hammer una copia de la carta inconclusa de Martí a Manuel Mercado, citada en un sinnúmero de ocasiones para justificar la postura hostil de Fidel Castro ante Washington.
Intocable por su condición, afable en su trato con los habitantes del país –opositores, pero también emprendedores y todo tipo de cubanos– y certero en sus evaluaciones de la crisis en la Isla, la popularidad del diplomático en las calles es directamente proporcional a la animadversión del régimen.
La semana pasada, Hammer ofreció en Miami una conferencia de prensa en la que dejó clara la posición de EE UU con Cuba y, además, su voluntad de apoyar a los cubanos. Una de las frases suyas que más resonó en La Habana fue esta: “La Administración está determinada a sancionar a los represores, va a haber consecuencias por sus acciones y no puedo adelantarme a más medidas que van a venir pero vendrán, eso sí le puedo asegurar”.
A sabiendas de que la Seguridad del Estado le sigue los pasos adonde quiera que vaya, asumió la situación con humor. “Obviamente hay mucho movimiento, se ven los Lada por todos sitios. Si giramos a la derecha, giran a la derecha. No me gusta ir hacia la izquierda, pero bueno, si vamos a la izquierda, van con nosotros. Me están filmando constantemente”.