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Crisis alimentaria, falta de medicamentos y embarazo adolescente: el cóctel para el aumento de las malformaciones congénitas en Cuba. Por Lucía Alfonso Mirabal. Diario de Cuba. 

Crisis alimentaria, falta de medicamentos y embarazo adolescente: el cóctel para el aumento de las malformaciones congénitas en Cuba
Por Lucía Alfonso Mirabal
Diario de Cuba
28 de enero de 2025

Recién nacido en una incubadora en Cuba. Invasor

La crisis del Programa Nacional de Atención Materno Infantil, aunque las autoridades sanitarias del régimen la nieguen, es un hecho.

La crisis del Programa Nacional de Atención Materno Infantil (PAMI), aunque las autoridades sanitarias del régimen la nieguen, es un hecho. Ejemplo de ello es el aumento sostenido de la mortalidad infantil reconocida por el Gobierno en Cuba, que cerró con una tasa de 3,9 por cada 1.000 nacidos vivos en 2018 y al término de 2024 fue de 7,1. Además, se han incrementado los casos de bajo peso al nacer y las malformaciones congénitas.

Ya en 2022 el Ministerio de Salud Pública (MINSAP) admitió que el PAMI "no alcanzó los resultados deseados" y atribuyó su descalabro a "la falta de dirigentes y otros funcionarios encargados de atender a madres y recién nacidos". Desde entonces, la situación ha ido a peor.

En tal sentido, la doctora Liset Caridad O'Farrill, directora del Centro Provincial de Genética de Villa Clara, dijo en diciembre de 2024 al medio local TeleCubanacán que las malformaciones congénitas mostraban una tendencia al alza en la provincia, siendo las anomalías más comunes los defectos del sistema nervioso central, los del aparato digestivo y los cardiovasculares.

O'Farrill explicó que "las hidrocefalias, las microcefalias, los defectos del tubo neural, los del tubo digestivo y, entre ellos, la atresia esofágica y la atresia intestinal" son las malformaciones más comunes.

La especialista dijo que "las causas de los defectos congénitos son multifactoriales, fundamentalmente los genéticos y los ambientales". Entre ellos, destacó "los parásitos, las bacterias y los virus como el citomegalovirus, el toxoplasma, la varicela y de manera especial en los últimos meses el Oropouche".

Falta de medicamentos

O'Farrill obvió la mala alimentación de las embarazadas y la falta de medicamentos y complementos vitamínicos como el ácido fólico, las pastillas prenatales y el Trofin, producto antianémico creado en Cuba en los años 90.

Sobre la falta de este último, y como otra evidencia del descalabro del sistema de salud cubano, en diciembre de 2024, la hija del Dr. Raúl González Hernández, creador e investigador principal del Trofin y la línea de productos asociados a dicho complemento, denunció en su perfil de Facebook que, desde su posición de científico jubilado, tenía que mendingar el medicamento para ella, luego de "años de entrega y de lucha para que este producto pudiera llegar a las diferentes poblaciones".

Elizabeth González Aznar escribió que, mientras a su padre le decían que la producción de Trofin era muy baja, ella supo que lo estaban vendiendo a 250 pesos a la población, sin receta ni nada, en una feria comercial en la Ciudad Deportiva de La Habana. "Luego se perdió de las farmacias y lo encontramos en la calle, por la izquierda, a 500 pesos. Era indignante, pero lo necesitaba. Ya de un tiempo para acá, ni eso", detalló.

Crisis alimentaria

La falta de Trofin no es el único de los problemas que afecta a las embarazadas en Cuba, toda vez que la alimentación es deficiente. Así, el Gobierno cubano reconoció en julio de 2024 que la crisis alimentaria es una de las causas del aumento de los recién nacidos con bajo peso, pero no hizo mención a las malformaciones congénitas, que también tendrían en esta crisis una de sus causas.

"Ante este escenario, la comprensión, atención y control de la situación demográfica requiere de un cambio de mentalidad", dijo el primer ministro cubano, Manuel Marrero, en una reunión de Gobierno el pasado año. Pero ese supuesto "cambio de mentalidad" se sigue quedando en la retórica, sin traducirse en acciones concretas que favorezcan la natalidad y mejoren las condiciones de vida tanto de las madres y sus niños pequeños.

Como una de las medidas con las que el régimen pretendió y no logró revertir una crisis enquistada en la sociedad, el Ministerio de la Industria Alimentaria dispuso en el verano pasado la entrega "de manera diferenciada en julio y agosto de un kilogramo de pescado a las embarazadas y de un módulo que contiene un kilogramo de pastas, uno de galletas dulces, sorbetos y sirope, a los niños registrados con bajo peso y talla".

Si bien el pescado es un alimento necesario durante el embarazo, su entrega solo por dos meses tiene poco impacto en el desarrollo del bebé. Además, respecto al módulo para los niños, es indudable que estos productos, según expertos en nutrición, no son los indicados para tratar a personas con bajo peso.

Embarazos adolescentes

Otra de las razones para explicar el alza de las malformaciones congénitas es el aumento de los embarazos adolescentes en Cuba. Este fenómeno refleja la disfuncionalidad de la fecundidad en un país donde las mujeres adultas se resisten a parir y la sociedad envejece.

Un dato que demuestra lo anterior es que el 18,9% de los nacimientos de 2023 fueron partos de mujeres de entre 12 y 19 años. Asimismo, existe una mayor tasa de embarazos adolescentes en las zonas rurales.

De acuerdo con la psicóloga y demógrafa Matilde Molina Cintra, subdirectora del Centro de Estudios Demográficos, de la Universidad de La Habana, el embarazo en la adolescencia "constituye la mayor desarticulación presente en la fecundidad cubana".

Además, "la mayoría de las adolescentes que se embarazan arriban a esta condición sin proponérselo. Este hecho dificulta la atención prenatal que reciben, así como su asesoramiento genético, lo que incrementa la posibilidad de fallas en el programa de diagnóstico precoz de las malformaciones congénitas", indicó el estudio "Embarazo en la Adolescencia y Defectos Congénitos. Estudio de 20 años en Matanzas", presentado en la IV Convención Internacional Cuba Salud.

"La vulnerabilidad de las adolescentes cuando se embarazan se debe a un riesgo de origen nutricional", subrayaron los responsables del estudio, todos doctores del Hospital Materno Infantil Provincial y del Departamento Provincial de Genética Médica de Matanzas.

Asimismo, encontraron "un bajo consumo de ácido fólico que predispone a la acumulación de homocisteína, responsable de los defectos del tubo neural".

Indefensión

Las autoridades sanitarias y políticas del régimen cubano son conscientes de esta situación, pero, ante ella, solo tienen para ofrecer la gastada propaganda que no resuelve ni la crisis alimentaria ni la falta de medicamentos ni la casi total ausencia de complementos vitamínicos ni los embarazos adolescentes ni, mucho menos, la consecuencia directa de estos elementos: el aumento de las malformaciones congénitas.

"Las circunstancias económicas que atravesamos han hecho mella en estas conquistas, estamos conscientes, pero esas dificultades no pueden ser pretexto para el estancamiento y la desidia", dijo Miguel Díaz-Canel en diciembre de 2024, al tiempo que el resquebrajamiento integral de la sociedad cubana es cada vez más profundo e irreversible.

Apuntes legales

El PAMI se aprobó en 1983. Es una plataforma programática centralizada y dirigida por el MINSAP para planificar, organizar, aplicar y controlar en todo el país las acciones y las normativas relacionadas con la salud reproductiva, y de la infancia y la adolescencia, en correspondencia con el análisis de la situación de salud a nivel local y con hincapié en garantizar el acceso equitativo a la atención de salud.

Respecto a la responsabilidad penal médica en casos de malas prácticas profesionales en el trato a embarazadas y recién nacidos, esta no cuenta con un apartado específico en el Código Penal, sino que está sujeta a delitos comunes como el homicidio o las lesiones. La diferencia es que, en esos casos, se juzgarían a modo de imprudencia.

Como medidas accesorias, sobre los médicos sancionados por este tipo de delitos recae la prohibición del ejercicio de una profesión, cargo u oficio en el sector sanitario.