'¡Patria y Vida! ¡Agua, comida', una protesta en Contramaestre termina en detención violenta Bajo investigación un joven laico católico que participó en un cacerolazo en Centro Habana. Diario de Cuba 23 de octubre de 2024
Una mujer que protesta es detenida en Contramaestre, Santiago de Cuba. Revolico Contramestre/ Facebook
Miren mi gente , ahora mismo en le centro de Contramaestre
En medio de cacerolazos registrados en toda la Isla tras el colapso del sistema electroenergético nacional (SEN) y las amenazas de Miguel Díaz-Canel a quienes exigen responsabilidades al régimen en las calles, la Policía detuvo el martes a una mujer en Contramaestre, Santiago de Cuba, por protestar por la falta de electricidad, de comida y de agua.
La detención ocurrió en el centro del poblado santiaguero, de manera violenta, ante la resistencia de la manifestante a subir a un auto patrullero, según un video publicado en redes sociales.
En medio del forcejeo se escucha a la detenida gritar "Patria y Vida", "Agua, Comida".
El martes Lázaro Guerra, director de Electricidad en el Ministerio de Energía y Minas, dijo que el sistema Oriente seguía en condiciones críticas. Pese a que cuatro motores de Moa ya generaban electricidad el martes por la mañana la cobertura de electricidad en Santiago de Cuba era de apenas un 9%.
En la capital cubana, algunas personas que participaron en protestas en Centro Habana también sufrieron detenciones.
La periodista y editora de la revista católica Vida Cristiana, Rachel Susana Diez, denunció en Facebook el arresto del joven laico Axel Martínez. En otra publicación explicó que después de una hora detenido fue liberado, pero bajo proceso de investigación.
La periodista independiente Neife Rigau recordó que Martínez participó en un cacerolazo hace dos días en el barrio de San Leopoldo, Centro Habana.
"Presumo que es la causa de esta detención. Como él hay muchas personas en la misma situación por el solo hecho de protestar en las calles ante la precariedad que está viviendo este pueblo. Mi solidaridad con todos ellos y sus familiares", escribió Rigau.
El martes el centro de información legal Cubalex denunció la detención arbitraria del activista Boris Agustín Osorio Ramos, quien fue trasladado sin motivo a una unidad policial y posteriormente abandonado en un lugar despoblado, en una grave violación de sus derechos fundamentales.
Osorio Ramos se sintió mal el sábado 19 de octubre, alrededor de la 1:45 de la madrugada, durante un apagón, y salió a la calle a tomar aire. Una patrulla lo detuvo y después de pasarlo por la estación policial de Dragones, en Centro Habana, fue trasladado a más de 80 kilómetros de su residencia en La Habana. Fue abandonado en el entronque del municipio Candelaria, en la provincia de Artemisa.
"Estas acciones, sin justificación legal, representan una amenaza directa a la integridad personal y forman parte de un patrón sistemático de represión destinado a silenciar a quienes denuncian los abusos del régimen", denunció Cubalex.
El grupo sobre detenciones arbitrarias Justicia 11J registró al menos 28 protestas en Cuba desde el pasado 18 de octubre cuando colapsó el sistema eléctrico nacional.
"Hasta la noche del día 20, de acuerdo con nuestro subregistro, se han producido manifestaciones en las provincias de La Habana, Villa Clara, Holguín, Mayabeque, Santiago de Cuba, Sancti Spíritus y Artemisa. Solo en la capital del país, se han producido 21 del total", informó Justicia 11J en un hilo en su cuenta en X.
Justicia 11J denunció que en una de las manifestaciones ocurridas el domingo 20 de octubre se pudo observar la represión de las autoridades. Se trató de una expresión pacífica de protesta frente a las instalaciones del Gobierno del municipio Manicaragua, en Villa Clara.
"Tememos el inicio de una nueva ola de detenciones arbitrarias a las personas que participan en manifestaciones públicas, o que expresan en redes sociales su voluntad de hacerlo", alertó el grupo.
Justicia 11J se hizo eco de las declaraciones de autoridades del régimen que calificaron a los manifestantes de los últimos días, cubanos desesperados por la falta de electricidad, agua y comida, como "indecentes", "vendidos" o "cobardes", y a quienes el propio Miguel Díaz-Canel amenazó con respuesta represiva.
"El gobernante Díaz-Canel ha continuado estigmatizando en días recientes a quienes protestan. Medios independientes reportan que civiles empleados del Estado cubano tienen la orden de enfrentar 'cualquier situación' que se produzca en las calles, además del notorio despliegue policial de los últimos días", condenó la organización.
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