Yoshitomo Nara. En busca de lo que faltaba en el Museo Guggenheim Bilbao. Por Félix José Hernández.
Ilusttrración:Yoshitomo Nara Desaparecida en combate, 1999 Pintura acrílica sobre lienzo 180 x 145 cm Cortesía de Sally y Ralph Tawil © Yoshitomo Nara, cortesía Yoshitomo Nara Foundation
Querida Ofelia,
Félix José Hernández.-Bilbao, 28 de junio de 2024.- “La soledad que experimenté en Alemania era diferente de la que conocí en Japón: era una soledad que no estaba vigilada por nada ni nadie. Al fin y al cabo, al principio ni siquiera hablaba el idioma. Sin embargo, cuando dibujo, quienes deseen entenderme pueden traspasar la barrera del idioma y empezar a comprenderme tras contemplar mis cuadros. Por eso, para lograr esa comprensión, insisto en dibujar todos los días”.
Tras completar el máster en la Universidad de Bellas Artes de la Prefectura de Aichi, con la intención de ampliar horizontes y continuar su formación, Nara se trasladó a Alemania. En su primer viaje a Europa, en 1980, con veinte años, había podido contemplar en persona la obra de los maestros modernos europeos, y pinturas altomedievales y renacentistas. Aquellas vivencias fueron sumamente reveladoras: quedó fascinado y descubrió que esas obras ejercían un gran magnetismo emocional sobre él. También adquirió un enorme aprendizaje a partir de la pintura de los impresionistas, los expresionistas y los artistas asociados a la Escuela de París. Se inspiró en su filosofía, su espiritualidad y sus técnicas para replantearse todo lo que había aprendido hasta entonces.
Yoshitomo Nara es uno de los artistas más célebres de su generación, y sus imponentes imágenes de niños de gran cabeza y ojos grandes —por momentos amenazadores, desafiantes e insolentes, pero también melancólicos e inseguros— son ampliamente reconocidas.
Los personajes de Nara, sus figuras y animales, son un reflejo de él mismo: recuerdos de su infancia, sus experiencias vitales, su conocimiento de la música, el arte y la sociedad, tanto en Japón como en el extranjero, constituyen la fuente de su creatividad.
Los temas que se repiten en su obra —incluyendo la casa de tejado rojo, los brotes, el charco, la caja, el barco azul y el bosque— revelan la continuidad de pensamiento que ha mantenido a lo largo de toda su carrera y ponen de relieve su evolución estilística.
La primera gran exposición individual de la obra de Nara que se celebra en un destacado museo europeo ha sido concebida expresamente para el espacio del Museo Guggenheim Bilbao. Posteriormente viajará a Baden-Baden y Londres, donde la muestra se rediseñará para adaptarse a cada una de las sedes.
Fechas de la exposición: 28 de junio–3 de noviembre, 2024
Comisaria: Lucía Agirre
Patrocina: Fundación BBVA
Organizada por el Museo Guggenheim Bilbao en colaboración con el Museum Frieder Burda, de Baden-Baden, y la Hayward Gallery, de Londres.
Un gran abrazo desde nuestra querida y culta Bilbao,
