Decenas de cubanos protestan en La Habana por la falta de vuelos a Nicaragua
Managua ya no exige visado, pero Copa y Conviasa no dan fecha para la reanudación de su servicio
Por JUAN DIEGO RODRÍGUEZ
14ymedio
25 de noviembre de 2021

Los cubanos que ven una vía de escape del país en la decisión anunciada por el Gobierno de Nicaragua de establecer la entrada libre para ciudadanos de la Isla tendrán que esperar: por el momento: no hay vuelos a Managua y no se sabe cuándo los habrá.

La indignación se apoderó este jueves de los clientes que se amontonaban a las puertas de las oficinas de las aerolíneas Copa y Conviasa en La Habana cuando los gerentes anunciaron que por el momento no se vendían pasajes y se negaron a dar más detalles. En Copa la protesta se limitó a unas quejas en voz alta, pero la frustración en Conviasa era tal que muchos amenazaron con acampar en el lugar hasta conseguir un boleto. Una patrulla de 'boinas negras' apareció para calmar los ánimos.

Las oficinas, ubicadas en la planta baja del Centro de Negocios de Miramar, eran este jueves un hervidero de ansiosos clientes. La mayoría llegaba por primera vez, después del reciente anuncio hecho por las autoridades nicaragüenses, con la intención de comprar un boleto desde La Habana a Managua con escala en Panamá.

La ruta de taxis privados que llevan hasta el lugar también estaban repletas de viajeros que se dirigían hacia el que se ha convertido en el punto de mayor confluencia de la capital cubana, donde la cola no es para comprar alimentos sino un ticket de avión que algunos consideran el primer paso hacia la emigración.

En un almendrón que cubría la ruta entre el Parque de la Fraternidad y el municipio Playa, una mujer iba pontificando sobre los mejores caminos para hacerse con un pasaje de avión. La señora explicó a los otros pasajeros que ella formaba parte de "un grupo numeroso" que se disponía a salir rumbo a Nicaragua en las próximas semanas.

Sin embargo, al igual que los otros clientes que esperaban desde la madrugada a las afueras de la aerolínea, las ilusiones de la mujer se toparon con la realidad de la falta de boletos para viajar. "No sé para qué abrieron a que los cubanos lleguemos sin visa a Nicaragua, si no hay aviones que nos lleven para allá", lamentó.

Otro frustrado cliente consideró que "esto aquí se puede convertir en un nuevo Maleconazo", ante los gritos, reclamos y el tumulto que rodeó la puerta de la oficina exigiendo sus boletos. "En agosto de 1994 fue la cancelación de los viajes de la lanchita de Regla lo que disparó la protesta social, ahora hay mucha gente molesta con un anuncio que no hay manera de cumplir".

Algunos sospechan que, al igual que con los visados a México y el propio Panamá, la venta de boletos se esté llevando a cabo en el mercado informal, donde los intermediarios se embolsan enormes sumas. La mayoría de los clientes cubanos no puede comprar un boleto de avión a través de internet porque carecen de las tarjetas bancarias Visa, Mastercard o de otro tipo necesarias para hacerlo.

Las tarjetas en moneda libremente convertible (MLC) que expiden los bancos cubanos no sirven para adquirir online un ticket de vuelo, por lo que los cubanos dependen de la venta en las oficinas de las aerolíneas, que un amigo lo compre desde fuera de la Isla o terminar en manos de los negociantes del mercado informal.

Las autoridades no han hecho ninguna alusión a esta falta de vuelos. Al contrario, la Embajada de Panamá en Cuba difundió este jueves un comunicado recordando que no se necesita esta documentación para hacer escala en el país.

En las calles habaneras ya es fácil escuchar sin necesidad de buscarlas conversaciones en las que se habla de viajar hasta Nicaragua gracias a la manzana envenenada de Ortega para Biden.

En los grupos de Facebook de cubanos en Nicaragua, la avalancha de dudas desborda incluso a quienes viven en el lugar. Los precios de los pasajes, los documentos necesarios, las posibilidades de quedarse legalmente en Nicaragua... Las preguntas son tantas que los usuarios dejan de responderlas por reiterativas. También hay quien ya ha visto el negocio y ofrece habitaciones o asesoramiento, y no faltan los consejeros que recomiendan llegar con dinero en el bolsillo porque, recuerdan, "hay de todo, pero no tienes un vecino que te ayude".