Prisoners Defenders hace un llamamiento a Josep Borrell para que interceda en favor de José Daniel Ferrer
Prisoners Defenders
 8 NOVIEMBRE, 2021

TRAS ANALIZAR LA GRAVE SITUACIÓN DE JOSÉ DANIEL FERRER POR MEDIO DE SU PROPIO TESTIMONIO:

Prisoners Defenders hace un llamamiento a Josep Borrell, Alto Representante de la Unión Europea, para que interceda en favor de José Daniel Ferrer, torturado, enfermo e intoxicado con psicofármacos en prisión en Cuba

José Daniel Ferrer se encuentra en la prisión Mar Verde de Santiago de Cuba desde que fue detenido el pasado 11 de julio, día en que se disponía a participar de las protestas masivas que tuvieron lugar en más de 50 ciudades de la isla, y a las que no pudo siquiera llegar.

En dos llamadas, José Daniel Ferrer ha descrito las siguientes torturas que se le están aplicando y que pueden acabar con su salud física y/o mental en muy corto espacio de tiempo:

Lleva más de 120 días encerrado entre 4 paredes blancas, sin ventilación alguna hasta hace apenas unos días, con el único mobiliario de una bombilla luminosa las 24 horas del día encendida.
Sufre de unos ataques sónicos que identifica y describe como “sonido de grillos”. Precisamente en ambas llamadas es posible escuchar claramente un sonido constante muy semejante al de los grillos. [1]  [2]
No ve la luz del sol jamás, lo que provoca carencias de vitaminas esenciales que el organismo necesita.
Sufre de intensos dolores de cabeza recurrentes, sangrado bucal, falta de aire, perdida de la visión. Esta sintomatología además no le permite dormir.
Sufre de una paupérrima alimentación en prisión y se alimenta de lo poco que los familiares le pueden llevar, pero a los familiares también les impiden pasar muchos de los alimentos que llevan.
No recibe tratamiento médico alguno, salvo la administración mediante engaño de una droga psico-activa, Alprazolam, que provoca falta de aire, inclinación al suicidio y alteraciones de la consciencia, como veremos.
La reticencia a cambiarle de celda, así como las obras realizadas en ella, como veremos, indican que ésta pudiera estar preparada tecnológicamente para la tortura.

Hacemos un llamamiento a D. Josep Borrell, a la Comisión Europea, al Gobierno de Canadá, al Gobierno de Noruega, y todos aquellos gobiernos mediante los cuales el régimen aún se nutre de activos financieros y políticos, y que por lo tanto tienen margen y herramientas para exigir el respeto de los derechos humanos, que colaboren de inmediato a impedir este lento y cruel asesinato de un notable defensor de los derechos humanos.

EL TESTIMONIO DE JOSÉ DANIEL

PRIMERA LLAMADA
En la primera llamada a su mujer, Nelva Ismarays Ortega, doctora en medicina, el pasado 19 de octubre José Daniel Ferrer indicaba:

“Sigo en la misma celda, una celda totalmente tapiada, no puedo usar ni siquiera el mosquitero porque no hay donde amarrar, son cuatro paredes blancas apenas, no fluye el aire, no hay una ventana que comunique con el exterior, no se ve absolutamente nada hacia afuera, es decir, un encierro total … Lo peor, tengo un ruido constante en la cabeza que como si fuesen grillos, sonando constantemente de una manera insoportable. Y eso me produce un dolor de cabeza más continuo constantemente. Hay dos celdas cerca que también serían en aislamiento total. Yo no veo a nadie, nunca he visto un preso cerca de donde yo estoy … hay dos celdas aquí que están completamente vacías y que al menos le entra un poco de aire, que podría amarrar el mosquitero porque tienen literas y que por lo menos se ve un pedazo de cielo, ¿no? Y entra la claridad del día. En la que estoy tiene una luz artificial que es bastante molesta. Siento que me está afectando grandemente la vista cuando salgo a los pequeños espacios. Ahora la semana pasada me sacaron lunes, miércoles y viernes a un pasillo de diez metros de largo por uno 1,80 de ancho, donde hay una puerta con rejas que te permite ver claridad hacia afuera y el contraste tremendo que hay me quedo casi ciego en medio de ese contraste, ¿no?, de ese tipo de encierro total. Es decir, mi encierro es tan severo, que a nadie se le impone. En los tiempos de mi primera prisión, lo más que podía estar un preso en un encierro parecido y no en celdas totalmente tapiadas, eran veintiún días. Y tenían otras condiciones las celdas. Entonces el hecho de que no me hayan querido poner en ninguna de las dos [celdas] cercanas y me mantengan en esta, por supuesto que significa que hay una clara y marcada mala intención. Ya te digo, no descarto incluso afectaciones con microondas a mi cerebro, a mí, a mi mente.”

En particular, hay un ruido constante que es perfectamente audible en la llamada, muy molesto y constante. Y en efecto se asemeja a un zumbido de grillos, como él referencia. En ambas llamadas está presente este ruido. José Daniel continuaba:

“Dale a todos siempre dale mi abrazo fraterno, mi saludo a todos los hermanos de lucha, de todos los grupos, de todas las organizaciones y que acá seguimos. Que el régimen podrá enloquecerme en el tipo de encierro en que me tienen, en las condiciones en que estoy, y podrá incluso quitarme la vida, pero rendirme jamás. Vamos a estar luchando por la libertad de Cuba mientras respiremos y mientras tengamos conciencia. El pueblo de Cuba merece ser libre.”

Respecto a ver el sol indicaba que “No, yo nunca he recibido sol. Estoy saliendo a un pasillo de 10 metros…” A la pregunta de si recibe atención médica, José Daniel sentenciaba que “No yo sigo con el problema de sangramiento de la boca y con todo ese tipo de problemas.”. Sobre si sigue faltándole el aire, tiene los dolores de cabeza y la presión alta, José Daniel indicaba: “Todo eso.”

SEGUNDA LLAMADA
En una segunda llamada, el pasado 5 de noviembre (117 días preso) Ferrer afirmó a su esposa:

“Sigo en la misma situación. Sigo en la celda de aislamiento y continúan los dolores de cabeza a veces con mayor intensidad, otra con menor intensidad, unas veces duran más tiempo, otras veces son breves, pero son bastante intensos y enloquecedores…”

ADMINISTRACIÓN MEDIANTE ENGAÑO DE UN PELIGROSO MEDICAMENTO PSICO-ACTIVO
A José Daniel Ferrer le administran en prisión un medicamente psicoactivo denominado Alprazolam (en otros países Xanax, Trankimazin o Tafil), una de las 3 benzodiacepinas orales más potentes del mercado que está demostrado provoca tendencias suicidas y depresión respiratoria, dos efectos que estaría sufriendo Ferrer, entre otros gravísimos efectos secundarios que posee el fármaco. Se le administró para “aliviar los dolores de cabeza”, y poder dormir. Sin embargo, este peligroso medicamento psicoactivo no está indicado para los dolores de cabeza y sólo se aplica a casos graves de trastornos de ansiedad y de pánico. En la segunda llamada evidenciamos la administración de este fármaco:

“He estado en los últimos tiempos a base de un medicamento nombrado Alprazolam para poder al menos dormir un poco y disminuir un poco la intensidad del dolor. El dolor no solamente se manifiesta no con esa situación intensa y desesperante, sino con un sonido constante, un zumbido constante en los oídos y una primera tesis que pensé que podría ser, que con la vacuna y la Abdala, que me pusieron bajo engaño porque me dijeron que había sido aprobada por la Organización Mundial de la Salud, que ya había sido autorizada, y ya me explicaste que no, que todavía no había definido eso de la manera debida, eh, pensé que podría ser el factor desencadenante de ese cuadro bastante extraño que jamás en mi vida había sufrido”

Al igual que el engaño perpetrado con el medicamente Alprazolam, hicieron lo propio al administrarle la vacuna Abdala. Le aseguraron que la Organización Mundial de la Salud la había aprobado. Ante tales engaños flagrantes, tampoco siquiera es posible saber si realmente se le administró tal vacuna, o cualquier otro fármaco.

La familia teme que provocarle estados alterados de conciencia provean la excusa para que el régimen le recluya en una institución psiquiátrica, algo que permite llegar mucho más lejos aún con las lesiones a provocarle. Alertamos de que estas prácticas contra presos políticos ya se han realizado en otras ocasiones, como el caso de Oscar Peña, un opositor al que no pararon de torturar hasta ingresarlo en el hospital psiquiátrico San Luis de Jagua, y allí destruirlo psicológicamente a base de “terapia” con electroshock. También se hizo algo similar con Adrián Cedeño, de Palma Soriano, activista que padecía de cierta depresión a raíz de la pérdida de sus padres en un accidente, y lo confinaron en el mismo hospital psiquiátrico San Luis de Jagua y con los tratamientos y torturas acabaron con él, y por supuesto con su activismo.

¿CELDA PREPARADA TECNOLÓGICAMENTE PARA LA TORTURA?
La celda de José Daniel, como él describe está rodeada por otras dos celdas de castigo vacías que sí tienen ventanas. José Daniel se plantó en huelga de hambre después de la primera llamada, para que le pasaran una celda con algo de ventilación. Los carceleros, en vez de pasarlo a las celdas contiguas, llamaron a toda una cuadrilla de albañiles, quienes realizaron un agujero en la celda actual y pusieron una pequeña ventana. Haber realizado tal esfuerzo de albañilería frente a la alternativa de pasarlo a una de las celdas contiguas indica que tal habitáculo puede estar preparado no sólo con cámaras, sino con cualquier tecnología que pueda estar diseñada para provocar los ruidos y ondas que José Daniel atribuye como la causa de su intensísimo y recurrente dolor de cabeza.

Así lo indicaba José Daniel:

“No, no, la celda en la misma situación, la celda lo que le abrieron una ventana, porque era completamente cerrada. Le abrieron una ventana hace una semana, y la salud… todo el cuadro que te he explicado, más los problemas gástricos que se controlan con los medicamentos que tú has estado trayendo.”