La Seguridad del Estado explica en Granma los sucesos en Santiago de Cuba. Asegura que se está en presencia de una operación de guerra sicológica de la CIA. Diario de Cuba.
13-02-2020
La Seguridad del Estado 'explica' en 'Granma' los sucesos en Santiago de Cuba Asegura que se está en presencia de una operación de 'guerra sicológica' de la CIA Diario de Cuba 13 de febrero de 2020
Por Kubanolive el 12 de febr. de 2020
Más de cuatro días después de que una multitud trató de linchar al presunto violador de una niña de ocho años en la barriada Nuevo Vista Alegre, en Santiago de Cuba, el diario oficial Granma ofreció su versión de los hechos, pero no a través de una investigación periodística o de entrevistas a los protagonistas de los sucesos.
En cambio, la publicación incluyó en su edición del miércoles un texto que, bajo el título "¿Quiénes están interesados en hacer creer al mundo que en Cuba existe un clima de inseguridad y violencia?", se debe a la autoría del exagente de la Seguridad del Estado Raúl Antonio Capote, alias Daniel.
El texto asegura que lo sucedido en Santiago, así como los reportes de los hechos en las redes sociales y los medios independientes, los primeros en ofrecer información sobre lo acontecido, buscan "conectar a las personas al odio", al realizar "llamados a la violencia y al desorden utilizando las redes digitales, mensajes que aparecen con cierto grado de sincronización, de articulación, en los principales medios de la contrarrevolución."
Capote dice que la Policía cubana "actuó conforme al derecho, en un país de leyes que respeta por encima de todas las cosas la integridad del detenido", pero no hace referencia a la fuerte presencia de fuerzas antimotines con armas largas, perros y chalecos antibalas, que llegaron a hacer disparos al aire para contener la ira de centenares de personas, que les respondió con piedras.
En cambio, Capote suscribe la versión del "youtuber Guerrero Cubano", un perfil anónimo de la Seguridad del Estado, y cita a una internauta que hizo referencia a una "turba enardecida", que él prefiere calificar como "un grupo" que "agredía a los agentes del orden que, a pesar de la compleja situación, jamás perdieron la calma y actuaron con suma profesionalidad."
El texto de Granma asegura que hubo "en las redes llamados a linchar, incendiar, destruir, a enfrentar a la Policía", y vincula esos hechos a operaciones de "pura y dura guerra sicológica" de la CIA que, según Capote, se aplicaron en Bolivia, Venezuela, Irán, Ucrania y otros países.
Capote no menciona que la "ira revolucionaria" es usada por el régimen en la forma de los "actos de repudio" contra activistas y opositores, que a menudo terminan en golpizas, táctica que fuera exacerbada por Fidel Castro a raíz del éxodo del Mariel en 1980, cuando cientos de personas fueron agredidas físicamente y las viviendas de muchos de los emigrantes atacadas y saqueadas.
Un residente en la zona de los sucesos, que habló bajo condición de anonimato con DIARIO DE CUBA, aseguró que, al arribar al lugar los boinas negras "se lanzaron del carro con las tonfas en la mano, y repartieron patadas y piñazos a diestra y siniestra, incluso a menores de edad. Eso generó el descontento de los presentes, que dejaron al violador en segundo plano y empezaron a gritarles asesinos a los guardias y a lanzarles piedras."
"Al principio eran unas pocas piedras que salían de techos y patios, pero luego la ira se generalizó, y todo el que encontraba un pedazo de ladrillo o piedra se lo arrojaba con odio a los guardias. Pero allí había algo más: era como una rabia contenida por mucho tiempo que por fin se liberaba, parecía un problema personal de cada cual y no una riña tumultuaria. La gente les tiraba piedras a los militares como al peor enemigo. Quizás porque muchos de los que estábamos allí habíamos sido en mayor o menor medida víctima de los abusos, el robo y la corrupción policial."