La Fiscalía del régimen pide nueve años de prisión para José Daniel Ferrer y a Roilán Zárraga Ferrer y Fernando González Vaillant, les piden siete años, y a José Pupo Chaveco, ocho.
17-01-2020
La Fiscalía del régimen pide nueve años de prisión para José Daniel Ferrer Lo acusa a él y a sus tres compañeros presos por el supuesto delito de lesiones. Diario de Cuba 17 de enero de 2020
Por UNPACU - 17 de enero de 2020
La Fiscalía de Santiago de Cuba pidió nueve años de cárcel para el líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), José Daniel Ferrer, denunció su esposa Nelva Ortega Tamayo, a través de un video.
La acusación contra el opositor lo imputa por el presunto delito de lesiones, mientras que a los tres activistas de la UNPACU detenidos junto con Ferrer, Roilán Zárraga Ferrer y Fernando González Vaillant, les piden siete años, y a José Pupo Chaveco, ocho.
Tras 107 días de encarcelamiento, Ortega Tamayo y los hijos de Ferrer lograron verlo el jueves último, y denunciaron haberlo encontrado muy delgado. "Continúa en celda de castigo en las mismas condiciones que hemos denunciado", dijo su esposa.
La petición fiscal, que Ferrer entregó a Ortega Tamayo, contiene "una versión distorsionada del los hechos" y "un sinnúmero de mentiras", aseguró la activista.
A inicios de enero, el Tribunal Provincial de Santiago de Cuba notificó la negativa del Habeas corpus interpuesto por activistas de la UNPACU a favor de Ferrer.
Ese procedimiento jurídico, reconocido universalmente e introducido en la Constitución cubana aprobada en febrero de 2019, permite que cualquier ciudadano pueda comparecer inmediatamente ante un juez para que este determine sobre la legalidad de su arresto.
A mediados de octubre, la activista Katherine Mojena informó a través de Cubanet que la solicitud a favor del líder opositor exponía "el incumplimiento de las formalidades legales establecidas en la Ley de Procedimiento Penal durante la detención de Ferrer García", y hacía "énfasis en que las autoridades ni siquiera mostraron una orden de arresto" contra el líder de la UNPACU.
Tanto la familia de Ferrer como los voceros de la UNPACU habían advertido que el régimen buscaba fabricar un caso contra el líder opositor.