Cubanos de adentro y de abajo toca hoy el tema de las corporaciones navieras dedicadas al turismo con y para beneficio del gobierno de Cuba, los grupos de contacto “pueblo a pueblo” relaciones que recientemente ambas fueron desaprobadas por la actual administración norteamericana y también comentaremos sobre el uso de las redes sociales como poderosa arma de combate contra la censura del poder. Comencemos por las declaraciones del gobierno de los EEUU liderado por su presidente Donald Trump que arrecia las medidas económicas contra la dictadura implantada en Cuba, así resume el Nuevo Herald las declaraciones del gobierno.
Esta vez le toco a las empresas navieras y alos grupos de contacto “pueblo a pueblo” una frase empleada solo para ocultar la estrategia e intenciones meramente política de estos grupos, pues para participar de ellos es requisito indispensable la servidumbre incondicional al gobierno castrocomunista que ha condicionado todo lazo de confraternidad, de relación cultural o académica y demás, a la servidumbre incondicional al régimen como requisito indispensable y obligatorio. No existe un solo individuo propuesto para esos viajes que no esté probado ser enemigo jurado de la administración norteamericana.Todo esto viene siendo producto directo del gobierno de Barak Obama queriendo congraciarse con la dictadura.
Pero bueno, los grupos de contacto, aunque provoca algunos beneficios al país no es de importancia ante la libre entrada y salida de barcos de turismo que si le proporciona cuantiosas ganancias directas y en moneda dura a la tiranía, según cifras conveniente al estado en 2017 entraron a la isla 320 000 pasajeros, gastando un promedio de 100 dólares cada uno serian 32 000 000 en el 2017, y 80 000 000 en 2018,esto sin contar las entradas producto de los contratos con esas compañías, capitales que van más a ingresar las arcas del poder, asegurar la ostentosa vida de las familias que participan en el gobierno, afirmar el acomodamiento de militares y cuerpos represivos, que a las obras sociales para mejorar la precaria vida del pueblo de adentro y de abajo, del cubano de a pie, siempre el más explotado y el menos beneficiado.
Según el medio informativo algunos emprendedores dedicados al negocio de la empresa “privada” aseguran que serán perjudicados en el sustento a sus familias y no dejan de tener razón, se le acaban los privilegios, pero que conste ser una minoría que en última instancia sirven a los intereses del gobierno, pues la empresa “privada” permitida no es realmente privada, sino planificada, controlada y regulada por el poder, aceptando la condición política en beneficio del Estado y para servir no a los intereses sociales colectivos sino como forma de palear improductividades e ineficiencias del régimen.
En una economía centralizada donde existe un solo dueño de todo, de instituciones bancarias y comerciales, cuyas gestiones económicas son prioridad del poder, todo y dígase todo en el sentido más amplio de la palabra, todo el capital va a manos del poder que no da cuenta a nadie ni responde por su empleo pues esa misma conformación infraestructural está diseñada para ello. Desgraciadamente estos supuestos emprendedores no aman a su prójimo, no lanzan una mirada al cubano de adentro y de abajo, a esa gran mayoría oprimida que no tienen contacto directo con el turismo y que el salario para ser consecuente no pasa de 30 dólares mensuales, lo que uno de ellos puede ganar quizás en unas horas o en un día. Buscando opiniones de algunos vecinos, por supuesto cubanos de a pie, pude apreciar que la mayor parte no sabían del tema, o no les preocupaba y otros estaban bien lejos de la realidad, con una percepción errada. Algunos alegaban que los cuentapropistas protestaban porque recibían directamente grandes ganancias, pero que mientras fuera así no les importaba mejorar la situación para el beneficio de todos.
Esta es la psicología socialista de masas, la estrategia utilizada desde el ascenso al poder por medio de la violencia de Fidel Castro, convirtiendo al cubano de adentro y de abajo enemigo de otro cubano también de adentro y de abajo que tiene menos, unos contra otros para que no se percaten que todo la base de nuestras miserias no está en el exterior, ni en la entrada y salida de barcos, ni en intercambios podridos plagados de asquerosa politiquería, ni en supuestos embargos a agresiones, sino en le estructura de poder bien planificada para mantener al pueblo sumido en promesas y esperanzas de progreso que nunca han llegado.
Si se cuenta que la mano de obra de Cuba es la más barata de América, las estadísticas de ganancias súper cuantiosas de alquileres, fuerza de trabajo sometida a la servidumbre de miles de cubanos en supuestas misiones humanitarias que son realmente embajadores de la política castrocomunista obligados a servirles por premisas económicas, agregando cifras de ganancias dadas por el mismo Estado, no hay justificación para los miles de necesitados de vivienda, para las ruinas en que se convierten las ciudades, carreteras, puertos, para el desabastecimiento de agua potable, para el estado deprimente de centros hospitalarios, para la carestía de productos de producción nacional, en fin, para la precaria vida del cubano de adentro y de abajo, que nada de esto ha sido heredado de los anteriores gobiernos, sino de sesenta años de gobierno de partido comunista.
Cada cubano que se haga responsable de su aparente demencia senil para cubrir su escasa dignidad. La aplicación de esas medidas económicas está bien, el arrecio o mejor dicho el establecimiento de un bloqueo que hasta ahora no había golpeado al gobierno está bien, la erradicación del contacto pueblo a pueblo está bien, el pueblo de adentro y de abajo nunca ha podido participar, las restricciones de remesas están bien, el establecimiento del respeto a las fronteras de los EEUU está bien, la estrangulación económica al gobierno está bien, es preferible morir de hambre a vivir esclavo, además, no moriremos de hambre pues el gobierno aunque intente culpar a los EE UU de su ineficiencia, las generaciones toman conciencia de donde radican nuestros males y no estamos aislados del mundo exterior como estas seis décadas de opresión y censura.
PREFERIBLE MORIR DE HAMBRE ANTES DE VIVIR ESCLAVO Por Agustín López Canino el 10 de junio de 2019