Cuba más próxima de la Economía de Mercado,
Por Jorge Hernández Fonseca.

La reciente visita a Cuba del secretario general del partido comunista de Viet Nam, así como sus declaraciones públicas en sentido de "la posibilidad de preservar el socialismo cubano es que la isla implante la economía de mercado (capitalista)", nos llaman a la necesaria reflexión.

Vale decir que, cualquier visitante comunista del nivel descrito puede, en reunión privada con los dirigentes cubanos, dar diferentes tipos de consejos, como ese dado por el vietnamita. Pero para exponerlo en público, tendría que haber cierto consenso de aceptación para poder decirlo con todas sus letras, por tratarse de un tema que ha sido muy discutido y fuertemente negado por el oficialismo castrista de manera categórica y repetitiva, como una solución casi imposible.

Así, el supuesto consenso de Raúl Castro para que el aliado vietnamita expresara semejante "desvío ideológico" de manera pública (según la óptica "revolucionaria" actual) nos mueve a pensar que la cúpula castrista al menos ha aceptado "analizar" esa variante para su moribunda economía. Si a esta deducción lógica se le agrega la información de que en realidad el visitante vietnamita es un enviado de la cúpula gobernante china, se encajan otros muchos elementos.

En efecto, en la actualidad hay un frenético intercambio de informaciones entre las capitales de China, Corea del Norte y Estados Unidos, con vistas a redondear los puntos para la desnuclearización de Norcorea, a cambio de los cual, tanto EUA como China y Corea del Sur garantizarían, no sólo estabilidad política en el Norte comunista, sino también la apertura de la patria de Kim Jong-Um a la economía de mercado con capitales chinos, sudcoreanos y de EUA.

No es descabellado entonces que China, como país líder entre aquellos en los que todavía dirige un partido comunista (China, Viet Nam, Corea del Norte y Cuba) acuerde con los vietnamitas ir a Cuba para convencer a Raúl Castro para sumarse al gran esfuerzo que se ha hecho en las negociaciones entre Xi Jinping y Donald Trump para desnuclearizar a Norcorea y al mismo tiempo llevarla a la economía de mercado, para incluir a Cuba en esa gran solución.

Para los gobernantes norteamericanos, chinos, vietnamitas y de Corea del Norte, este momento de cambios en el gobierno de Cuba es el ideal para convencer a Castro de hacer movimientos hacia la economía de mercado capitalista en la isla y eso es lo que está sucediendo ahora.

Los próximos pasos los veremos en la Cumbre de las Américas y lo que allí se converse entre Trump y Castro, sino públicamente, al menos "por debajo de la mesa" en el terreno diplomático, donde está faltando un "mea culpa" cubano por las afectaciones a diplomáticos de EUA dentro de la isla, aspecto en el que el oficialismo castrista todavía niega lo evidente en cuanto a sus culpas por los desarreglos en la salud de los funcionarios de EUA y Canadá en la Habana.

Aparentemente, la cúpula gobernante norteamericana aceptaría una Cuba con gobierno militar "fuerte", pero con una economía de mercado que reorganice su sistema productivo y permita a la población el acceso normal al consumo, sin tener la necesidad de emigrar forzosamente.

 
          pedroc1943@msn.com

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